Esto de no tener sueños ni anhelos se esta volviendo cada día más insostenible, inestable, paralizante y cagante.
Vivir inertemente, por casualidad, por coincidencia.
Sin embargo puedo soñar que sueño, desear que deseo.
O aceptar que no anhelo sincero, que me dan miedo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario